El secretario ejecutivo del Instituto Nacional Electoral (INE), Edmundo Jacobo, ha sido reinstalado en su cargo después de haber sido destituido por el Gobierno mexicano. La decisión de su destitución fue publicada en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el 1 de marzo, y Jacobo regresó al INE doce días después de su cese.
La decisión de destituir a Jacobo fue impugnada por la jueza María Elena Suárez Préstamo, quien otorgó una suspensión definitiva al considerar que su cese era inconstitucional, en este sentido, la juzgadora argumentó que el cese de Jacobo se basó en una ley “privativa”, que está prohibida en la Constitución. Como resultado, el Consejo del INE convocó una sesión extraordinaria para reinstalar a Jacobo.

Al reasumir su cargo, Jacobo destacó que la sentencia de la jueza es importante no solo para él, sino también para la defensa del Estado mexicano y para evitar que el poder se convierta en una amenaza, y agregó que la ley es fundamental para el estado de derecho y quebrantarla o fingir su vigencia solo erosiona su valor.
El presidente del Consejo del INE, Lorenzo Córdova, se unió a los aplausos y felicitaciones a Jacobo, y dijo que su restitución es un acto de justicia que restituye a un funcionario probo, honesto y comprometido.
Además, Córdova destacó que la decisión también es un paso importante para salvaguardar la autonomía e independencia del INE.
La decisión de la jueza Suárez Préstamo y la reinstalación de Jacobo son un recordatorio importante de la importancia de la ley y el estado de derecho en México. También destacan la importancia de la independencia de las instituciones gubernamentales y la necesidad de defender la autonomía de estas instituciones para garantizar una democracia saludable y funcional.
