Una nueva investigación publicada en la revista JAMA Network Open dice que las niñas con diabetes tipo 2 pueden tener un mayor riesgo de desarrollar este mal.

Como explicó Constantine Samaan, autor del estudio y profesor asociado de pediatría en la Universidad McMaster y el Hospital Pediátrico McMaster en Hamilton, Canadá, “se necesita hacer más para explorar los factores genéticos, epigenéticos y ambientales que expliquen esta asociación”.

Posiblemente, la resistencia a la insulina juega un papel central en ambas condiciones, dijo Samaan, y agregó que cuando el cuerpo no responde bien a la insulina, el azúcar en la sangre puede acumularse en la sangre, lo que finalmente lleva a la diabetes tipo 1.

Samaan y sus colegas realizaron una revisión para controlar mejor el riesgo de síndrome de ovario poliquístico en niñas con diabetes tipo 2, que encontró que solo el 20 porciento de 470 niñas con diabetes tipo 2 de seis estudios incluidos en diferentes países tenían SOP. Esta tasa, según el experto, “es al menos el doble que la de la población joven en general”.

“Anteriormente sabíamos que algunas niñas con diabetes tipo 2 pueden desarrollar SOP y nuestro artículo define la prevalencia mundial del SOP específico de la diabetes tipo 2 en las niñas”.

Por lo tanto, Samaan argumenta que “las niñas con diabetes tipo 2 deben ser educadas sobre el riesgo de SOP y las pacientes deben compartir información sobre períodos irregulares, acné o crecimiento excesivo de vello con sus padres o tutores para que se puedan realizar más investigaciones y la atención adecuada”.

Según los investigadores, “las personas con SOP tienen un mayor riesgo de síndrome metabólico y diabetes tipo 2, por lo que deben someterse a pruebas de detección de estas afecciones y las personas con obesidad o diabetes tipo 2 deben someterse a pruebas de TPV”.